Página 132 - Libro de Lengua y Literatura de Tercero de Bachillerato

Textos literarios latinoamericanos de los siglos XIX-XXI

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Contenido Página 132 - Libro de Lengua y Literatura de Tercero de Bachillerato

más brillante que el alba, más hermoso que Abril!

"Calla, calla, princesa" -dice el hada madrina-,

"en caballo con alas hacia aquí se encamina,

en el cinto la espada y en la mano el azor,

el feliz caballero que te adora sin verte,

y que llega de lejos, vencedor de la Muerte,

a encenderte los labios con su beso de amor..."

Fragmento de Huasipungo

Autor: Jorge Icaza

(...) El ruido de la cabalgata, con los jinetes otra vez en las mulas, pone en guardia a los perros que lanzan protestas aulladas desde los huasipungos. Atardecía y la cabalgata entraba al pueblo de Tomachi. El invierno, la montaña y la miseria han hecho de Tomachi un pueblo de lodo, de basura y de acurrucamiento; se acurrucan las chozas a lo largo de la única calle lodosa y adornada de basureros se acurrucan los guaguas a las puertas de las viviendas a jugar con el barro o a mascar el calorfrío del paludismo, se acurrucan las mujeres junto al fogón, tarde y mañana, a preparar la mazamorra de mashca o el locro de cuchipapa, se acurrucan los hombres, de seis a seis, junto al trabajo de la chacra, de la montaña, o se pierden por los caminos con sus mulas llevando carga a los pueblos vecinos. La callejuela está tatuada por una pequeña acequia de agua turbia, donde abreva el ganado de los huasipungos, donde los cerdos hacen sus camas de lodo para revolcar sus ardorres, donde los niños, sacian la sed. Corre un frío seco y cortante. Abajo queda el valle en silencio, repleto de luz crepuscular (...).

Fragmento de La casa de los espíritus

Autora: Isabel Allende

Ése fue el viaje más largo de Marcos. Regresó con un cargamento de enormes cajas que se almacenaron en el último patio, entre el gallinero y la bodega de la leña, hasta que terminó el invierno. Al despuntar la primavera, las hizo trasladar al Parque de los Desfiles, un descampado enorme donde se juntaba el pueblo a ver marchar a los militares durante las Fiestas Patrias, con el paso de ganso que habían copiado de los prusianos. Al abrir las cajas, se vio que contenían piezas sueltas de madera, metal y tela pintada. Marcos pasó dos semanas armando las partes de acuerdo a las instrucciones de un manual en inglés, que descifró con su invencible imaginación y un pequeño diccionario. Cuando el trabajo estuvo listo, resultó ser un pájaro de dimensiones prehistóricas, con un rostro de águila furiosa pintado en su parte delantera, alas móviles y una hélice en el lomo. Causó conmoción. Las familias de la oligarquía olvidaron el organillo y Marcos se convirtió en la novedad de la temporada. La gente hacía paseos los domingos para ir a ver al pájaro y los vendedores de chucherías y fotógrafos ambulantes hicieron su agosto. Sin embargo, al poco tiempo comenzó a agotarse el interés del público. Entonces Marcos anunció que apenas se despejara el tiempo pensaba elevarse en el pájaro y cruzar la cordillera. La noticia se regó en pocas horas y se convirtió en el acontecimiento más comentado del año. La máquina yacía con la panza asentada en tierra firme, pesada y torpe, con más aspecto de pato herido, que de uno de esos modernos aeroplanos que empezaban a fabricarse en Norteamérica.