Página 110 - Libro de Lengua y Literatura 2 de Décimo Grado

Para abordar esta reflexión, define primero qué son los esquemas cognitivos y cómo funcionan. Luego, piensa en modismos o gestos de tu entorno y cómo alguien de otra cultura podría percibirlos de manera distinta.

Análisis del problema: La pregunta solicita comprender de qué manera el bagaje personal y cultural de cada receptor condiciona la forma en que interpreta un mensaje.

Resolución paso a paso:

1. Se identifica el concepto de “esquemas mentales” o “marcos de referencia”: cada individuo procesa la información según conocimientos previos.
2. Se ejemplifica con una anécdota: por ejemplo, un saludo tan sencillo como el abrazo puede entenderse en unas culturas como un gesto amistoso y en otras como una invasión del espacio personal.
3. Se relaciona la influencia de valores, creencias y experiencias previas: recuerde que lo que para unos es una broma para otros puede ser una ofensa.

Conclusión/Respuesta final: Las experiencias de vida y los antecedentes culturales actúan como filtros que dan distintos matices a un mismo discurso, de modo que dos personas pueden extraer significados divergentes de un mismo mensaje.

Recuerda que en comunicación intercultural la retroalimentación y el parafraseo son claves. Antes de asumir un significado, pide siempre ejemplos de uso.

Análisis del problema: Se pide diseñar un método de comprensión intercultural y proponer estrategias de comunicación para términos polisémicos según la cultura.

Resolución paso a paso:

1. Contextualizar: antes de usar o interpretar la palabra, solicita ejemplos de uso en la cultura de tu interlocutor.
2. Practicar la reformulación: parafrasea lo que entiendes y pide confirmación (“¿quieres decir que…?”).
3. Usar preguntas abiertas: indaga sobre matices culturales (“¿en tu país suele tener connotación positiva o negativa?”).
4. Emplear ejemplos neutrales: para evitar ambigüedades, acompaña la expresión con una breve explicación del sentido que quieres transmitir.

Conclusión/Respuesta final: Una combinación de escucha activa, parafraseo y preguntas de clarificación asegura que tanto emisor como receptor compartan el mismo significado y minimiza los malentendidos.

Para profundizar, identifica un estereotipo común en tu entorno y analiza cómo altera la conversación. Pregúntate: ¿qué información real tengo para sostener esa idea?

Análisis del problema: La pregunta incita a reflexionar sobre cómo los prejuicios y estereotipos afectan la interacción diaria.

Resolución paso a paso:

1. Definir estereotipo: imagen o idea simplificada de un grupo con base en creencias preconcebidas.
2. Explicar efectos negativos: distorsionan la percepción del otro, generan juicios apresurados, limitan la empatía y pueden ofender al receptor.
3. Dar ejemplos prácticos: asumir que alguien “habla mal” por su acento o pensar que un adolescente “no entiende” por su edad.

Conclusión/Respuesta final: Los estereotipos introducen sesgos en la comunicación, distorsionan la relación entre emisores y receptores y dificultan el entendimiento genuino, por lo que es esencial cuestionarlos constantemente.