Libros Ministerio EcuadorLibros Ministerio Ecuador

Página 89 - Libro de Lengua y Literatura 2 de Octavo Grado

Los personajes

Cargando Página 89 - Libro de Lengua y Literatura 2...

Contenido Página 89 - Libro de Lengua y Literatura 2 de Octavo Grado

El chico apoyó arrulladoramente la cabeza en el pecho de su padre. Ferguson lo separó suavemente.

[Ilustración: personajes de la narrativa conversando]

—Vete ya, Jacky, pequeño —dijo—. Ahora, señor Holmes prosiguió, realmente me doy cuenta de que le he metido en un problema sin solución, porque ¿qué puede hacer aparte de concederme su simpatía?

—Es ciertamente delicado —dijo mi amigo, con una sonrisa divertida—, pero no complejo. Y podemos decir confiadamente que hemos llegado a la meta. De hecho, ya había llegado a ella antes de salir de Baker Street; el resto ha sido meramente observación y confirmación.

—Por el amor del cielo, Holmes —dijo Ferguson roncamente—, si es usted capaz de ver la verdad de este asunto, no me mantenga en la inquietud. ¿Qué debo hacer?

—Desde luego, le debo una explicación, y la tendrá. Pero ¿me permite llevar las cosas a mi manera? ¿Puede recibiros la dama? Solo en su presencia podremos aclararlo todo. Subamos a verla.

—No me recibirá —exclamó Ferguson.

—Oh, sí, lo hará —dijo Holmes. Garrapateó unas pocas líneas en un papel—. Usted, al menos, tiene la entrada, Watson. ¿Tendrá la bondad de entregarle esta nota a la dama?

Subí nuevamente, y entregué la nota a Dolores, que abrió la puerta cautamente. Al cabo de un minuto oí un grito en el interior, un grito en el que parecían mezclarse la alegría y la sorpresa. Dolores sacó la cabeza por la puerta.

—Les recibirá. Escuchará —dijo.

Ferguson y Holmes subieron a mi llamada. Ferguson se dejó caer en un sillón, y Holmes y yo nos sentamos al lado de la dama, que miró a Holmes con los ojos dilatados por el asombro.

—Mire, señor Ferguson, soy un hombre ocupado, y mis métodos tienen que ser breves y directos —dijo Holmes—. La operación quirúrgica más rápida es la menos dolorosa. Permítame que antes que nada le diga algo que tranquilizará su espíritu. Su mujer es muy buena, muy amante, y ha sido tratada muy mal.

Ferguson se puso en pie con un grito de alegría.